- Soy chilena, del Puerto de Valparaíso, y me llegada a España fue toda una aventura. Vi la posibilidad de venir a estudiar y no miré para atrás. Lo típico que se dice "vine por 6 meses y ya son 6 años", pues eso me pasó a mi. Ahora que miro con mucha distancia veo que todo tiene su razón de ser.
- Vivo en Granada, y desde que pisé esta tierra me enamoré de ella. Pensé "es aquí donde quiero vivir". Aunque extraño mi tierra natal, mi familia, mis hermanas, estamos formando una propia, con la gracia de un poco de chilenismo, y españolismo. Tratamos de ir a Chile, o ellos de visitar España cada 2 años, así que no perdemos mucho el contacto.
- Estudié ingeniería, pero mi gran pasión desde los 10 años era ser una gran bailarina clásica. Sí, ¡que contradicción de carreras! Pero tengo algo de ambos mundos, y me gusta descubrir que puedo utilizar los recursos de cada bando para llegar a lo que quiero conseguir.
- Soy culo inquieto, y más que culo inquieto, mente inquieta. A mi marido ya lo tengo un poco aturdido con mis idas y venidas de las ideas que se me pasan. Cada vez que le digo "se me ha ocurrido..." le veo sus ojos que me dicen "a ver, con que va a salir ahora". Lo bueno es que al final siempre saco algo positivo, aunque no sea realizable. Ese es el camino de aprender de los errores, aunque nunca se ejecuten, pero con el hecho de decirlo, estamos dando el primer paso.
- ¿Les dije que llegue a España en plena crisis? ¡Que iba a saber donde me estaba metiendo, más encima con una ingeniería como profesión! Así que en cierto momento tuve que improvisar. Una vez más con la ayuda de las palabras de mi marido, me embarqué en algo nuevo para mi. Tiré de mis "recursos artísticos" y me ofrecí para dar clases de ballet clásico. Fue todo un descubrimiento saber que me gustaba mucho enseñar y que a mis alumnas les gustaban mis clases.
- Y llegó mi maternidad, una niña que cambió mi mundo. Ella es mi gran inspiradora en todo lo que hago. Así nació mi primer blog (El Patio de Alba), con la idea y las ganas de querer compartir lo que iba viviendo y las cosas que hacía para ella. En el fondo, quería dejarle a ella algo para el recuerdo.
- La maternidad me llevó a otra cosa. Empecé a conocer a muchas madres, un nuevo mundo. Nació de allí AGAMAMAS (Asoc. Granadina de Apoyo a la Maternidad). Empecé a dar clases de yoga para la madres y sus bebés ¡que experiencia!, y cada una aportaba con algo que podía ofrecer desde sus conocomientos.
- Me encantan las manualidades, y creo que lo más profesional que he llegado a hacer, fue juguetes de madera. Cuando tenía 18 años necesitaba un trabajo para aportar en casa, y un familiar me invitó a trabajar en su taller. Trabajaba la caladora, iba cortando la madera hasta que finalmente formábamos el puzzle (uno de los tantos juguetes que se hacían). Ese era mi trabajo principal, pero ayudaba luego con otras tareas como lijar, pinta, embalar. Fue uno de los trabajos más alucinantes y del que más me siento orgullosa.
- Muy pero muy aficionada a la fotografía. Tengo una EOS 1000D y con ella ando para todos lados. He escuchado a personas decir "no entiendo porqué van con la cámara siempre", y cuando escucho eso me siento identificada "porque podrías perderte de grandes momentos, o de grandes imágenes que están a tu alcance". Me gusta la fotografía.
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| Un pequeño pajarito mira por mi ventana |
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